El número de sesiones necesarias depende de las zonas tratadas, de la cantidad de depósitos de grasa y de la respuesta de la persona al tratamiento. Por ejemplo, alguien que tenga una gran cantidad de grasa en el abdomen puede necesitar más sesiones que alguien que tenga depósitos de grasa más pequeños en los muslos. En general, la mayoría de las personas ven los mejores resultados después de una o dos sesiones, raramente en la tercera sesión. Sin embargo, algunas personas pueden necesitar tratamientos adicionales para lograr los resultados deseados.